La referencia histórica de posesión del Esequibo se mantiene como una constante en la opinión ciudadana pero con poco conocimiento de los últimos roces por la zona marítima
Mónica Duarte
El conflicto sobre la fachada atlántica con Guyana no está presente dentro de la cotidianidad del venezolano. En una encuesta realizada a 15 personas, se pudo saber que los ciudadanos no manejan información sobre los recursos naturales que están en juego en la zona ni de las últimas disputas territoriales.
La educación venezolana se ha encargado de impartir desde primaria el sentimiento de pertenencia hacia la Guayana Esequiba. Al hacer memoria sobre los mapas de Venezuela colgados en las aulas, muchos recuerdan esas franjas rojas que atravesaban la llamada “zona en reclamación”. Este es el principal referente que tienen los venezolanos para sentir como propio el territorio al oriente del Roraima.
“El Esequibo es nuestro” es uno de los lemas que más se escucha en la opinión pública en cuanto al diferendo limítrofe que tiene el país con Guyana desde antes de ser una nación independiente.
Para Crisbel Perez, una diseñadora gráfica de 27 años, Venezuela no debe dejar que exploten el petróleo en el área marina del Esequibo. “Deben agarrarse a la historia y a los viejos mapas”.
Muchos piensan que esa región sin duda alguna es venezolana pero las acciones de soberanía, diplomacia o negociación que se realizan por parte de los gobiernos para resolver el conflicto son enteramente ajenas al conocimiento público. Seis de 15 encuestados dijo no conocer los últimos roces entre ambas naciones.
El chef Carlos Madera, de 23 años, cree que una posible solución es acudir a la Corte Internacional de La Haya como lo hace Bolivia con Chile en su controversia marítima. “Deberíamos ejercer soberanía sobre el Esequibo, pero es una lucha con grandes imperios. Aunque no creo que se soluciones, hay que ejercerla por todos los medios”, dice Madera.
En la consulta realizada en la calle por “La Razón”, solo tres de los 15 encuestados manifestaron creer que ya es un territorio “perdido” por no ejercerse nunca la soberanía con acciones concretas en el resguardo de la zona.
El silencio del gobierno y la “complicidad internacional” con el anterior presidente de Guyana son las principales razones que dieron los encuestados sobre la pérdida de facto de este territorio.
“Se debe hacer un gobierno decente en la zona si de verdad se quiere recuperar. Hay que hacerse cargo de los problemas y tomarlo como parte del país”, expresó el estudiante Iván Sánchez, para quien el Esequibo “ya se perdió” por nunca tomarse seriamente como parte del país.
80% de los entrevistados cree que se debe pelear por la recuperación completa de la región. Los métodos pacíficos y las negociaciones prevalecen como las mejores opciones para la población, dentro de las cuales debe manejarse el gobierno para solucionar la controversia limítrofe.
Entre los responsables de solucionar la disputa entre Venezuela y Guyana por el Esequibo, el nombre que más se perfila es el del presidente venezolano Nicolás Mauro, seguido por los representantes de la cancillería. La necesidad de mediadores internacionales fue mencionado como un factor importante para la mitad de los encuestados.
La profesora Nardi Mora, de 54 años, considera que el gobierno debe ser más activo en la reclamación. “Es responsabilidad de todo el gobierno, de las Fuerzas Armadas, del Ministerio de Relaciones Exteriores y del Ejecutivo nacional poder solucionar esto”.
La presencia de recursos minerales y el reciente hallazgo de petróleo frente a las costas de Guyana sigue siendo de poco manejo público, solo 5% de la población encuestada conocía esta información. Según se pudo ver, el venezolano de a pie no está conectado con el conflicto, no reconoce la importancia de Guyana, pero sí afirma que “nos pertenece”.
Si quieres contactar a la autora de esta historia, escribe a monica@larazon.net
