De lo contrario los miembros de la MUD-AN quedarán ante el mundo entero como unos solemnes pendejos
Jesús Antonio Petit Da Costa
Anuncia la MUD-AN la toma de Caracas para el 1S, pero con este objetivo: obligar al CNE a fijar la fecha del revocatorio y de las elecciones regionales (gobernadores y consejos legislativos).
Sinceramente es cosa de pendejos tomar a Caracas para no echar a Maduro de una vez, sino para esa ridiculez.
Tomar a Caracas es el sueño de todo movimiento de masas que se propone derrocar el tirano y tomar el poder. Así lo entendió la generación del 58 a la cual me honro en pertenecer.
Cuando decidimos tomar a Caracas el 21 de enero de aquel año, siguiendo las directrices de los líderes democráticos de la época, fue para derrocar al tirano y tomar el poder.
Nos costó dos días de lucha a sangre y fuego, durante los cuales hicimos cumplir la orden de huelga general.
Y al tercer día conseguimos la victoria. Entendimos que tomar a Caracas para pactar con el tirano, dándole tiempo, hubiera sido la más grande pendejada que podíamos cometer, que como tal hubiera registrado la historia haciéndonos quedar en ridículo hasta la eternidad.
Tomada Caracas el poder era nuestro, ganado para la democracia. Esa fue la lección que aprendimos de nuestros mayores y la que dimos a las generaciones siguientes.
Nosotros teníamos todo en contra. No contábamos con un Congreso que procediera como debería proceder la AN controlada por la MUD efectuando, en vísperas de la movilización popular, lo que podría calificarse de revocatorio exprés:
A) Declarar la falta absoluta del tirano por estas tres causas: 1) Por ser ilegítimo ya que no cumple con el requisito de la nacionalidad exigido por los Arts. 41 y 227 de la Constitución; 2) Por estar incurso en abandono del cargo (Art. 233) ya que ha delegado la jefatura del gobierno en el general Padrino, fundamentando la delegación en un estado de excepción constitucionalmente inexistente porque no fue aprobado por la AN como lo dispone la Constitución; y, 3) Por haber roto el orden constitucional (Art. 333), como ha sido declarado por la propia AN, al constituirse en tirano, siendo además títere de Cuba, a cuyos jerarcas rinde pleitesía, llegando hasta la indignidad de llevarle serenata a Fidel Castro, reconociéndolo así como padrote de Cubazuela, denominación con que se conoce internacionalmente, para deshonra nuestra, a la que fue Venezuela.
B) Encargar su cumplimiento al pueblo soberano convocándolo con este fin para el 1S, al cual se apela, porque la soberanía reside en él, y por cuanto los demás poderes públicos se han alzado contra la Constitución negándose reiterada y manifiestamente a acatar las decisiones de la AN, depositaria de la soberanía popular.
Si este fuere el motivo de la convocatoria Venezuela entera se presentaría emocionada en las calles de Caracas, trasladándose por cuenta propia desde los más remotos lugares, por vía terrestre, aérea y marítima, sin importar edad, sexo, raza y religión, estatura o peso. No habría poder humano que detuviera a la multitud.
Militares, policías y bandas criminales serían desbordados y apartados por aquel aluvión incontenible de gente. Y, como sucede siempre, militares de alto rango terminarían sumándose y Maduro huyendo velozmente a La Habana antes de caer en manos del pueblo.
Si los señores de la MUD-AN quieren pasar a la historia como los más grandes pendejos de Venezuela en dos siglos mantengan su convocatoria con el objeto de rogarle a Maduro, dueño del CNE, que fije la fecha en la cual accede gentilmente a que lo revoquen.
Los exhorto a que recapaciten para que tengan en la historia un lugar de honor. Pero si mantienen la convocatoria para esa pendejada, vayan preparando sus maletas porque con Maduro se irán.