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Rafael Narváez: “Cuerpos de seguridad del Estado actúan al margen de la ley”

Advierten que los distintos cuerpos de seguridad oficiales realizan procedimientos sin ningún tipo de control

Rafael Narváez alertó que se mantiene la violación sistemática contra los derechos humanos

El defensor de los derechos humanos y director de la ONG Derechos Civiles, abogado Rafael Narváez, denunció que el Estado venezolano ha sido permisivo en la actuación de los cuerpos de seguridad oficiales en procedimientos que se encuentran al margen de la ley.

En este sentido, precisó que los distintos cuerpos de seguridad oficiales actúan sin ningún tipo de control en actuaciones tales como detenciones arbitrarias, allanamientos sin orden judicial y las desapariciones forzadas de personas.

El Estado es indolente e indiferente con los jubilados y pensionados, y también para los educadores, enfermeras y trabajadores»

Resaltó que la ciudadanía sigue siendo víctima de la represión. “La violación sistemática de los derechos humanos en Venezuela se mantiene como política de Estado”, reiteró.

Por otra parte, indicó que el Estado es indolente e indiferente con los jubilados y pensionados, y también para los educadores, enfermeras y trabajadores en general. Al respecto, atribuyó al Estado la responsabilidad por el fallecimiento en Caracas de dos adultos mayores producto de la desnutrición.

“Esto constituye una grave violación al derecho a la alimentación, a la salud y al trabajo”, destacó.

“El hambre de la gente pobre no es prioridad para los altos funcionarios»

Explicó que un Estado sin “alma” mantiene sometido al pueblo a un “tortura estomacal” con sueldos y pensiones miserables, y servicios públicos colapsados. “El hambre de la gente pobre no es prioridad para los altos funcionarios; para quienes lo más importante es mantenerse de manera perpetua en el poder sin importar el bienestar social de los ciudadanos”, afirmó.

Adelantó que los aguinaldos que el Estado les dará a los trabajadores solo alcanzarán para comprar un cartón de huevos y un kilo de queso. “No habrá Niño Jesús, tampoco hallacas y será imposible comprar pan de jamón”, acotó.